Compañero:
-Oye, ¿te acuerdas del chiste que me contaste ayer, ese que me reí tantísimo y que me gustó tanto?
Yo:
-Sí.
Compañero:
-¿Me lo podrías explicar? Me he dado cuenta de que no sé de qué me reía, porque no lo entiendo.
Yo:
-Ains.
Hace 1 semana
2 comentarios:
jajjajaja... pues a mi me ha gustado!!
;)
por cierto ponte pero ya a estudiar matematicas para que seas una notaria de provecho, pero recuerda que tienes que ser limpia y lavarte las manos!!!!!!!
genial...
Son bastante más frecuentes de lo que parece esas "risas de hiena" (por su analogía con las "lágrimas de cocodrilo", igualmente falsas).
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